Por Juan Tomás Valenzuela
El señor Fanklin Almeyda,
se levantó presuroso
cuando hablaron de mañoso,
pues lo hicieron coger cuerda.
Este antiguo hombre de izquierda,
cascarrabias y prepotente,
es un alto dirigente
del partido de Juan Bó,
que en Interior se bebió,
de millones, más de 20.
Él mismo, que una vez dijo
cuando eran de oposición,
que está sufrida nación,
por todos los desvalijos,
dividía a todos sus hijos,
según su punto de vista,
en ladrones reformistas,
además de otros partidos
y en un grupo reducidos
de “dignos peledeistas”.
Ahora se voltió la torta
y esa frase proverbial
no se puede interpretar
como la dijo esta morsa.
Él, que tenía un Opel Corsa
y ahora tiene un jeepetón,
cuando mencionan ladrón
de una vez para el pechito,
como Leonel, Reinaldito,
o mi compadre Rondón.
Yo sentí vergüenza ajena
cuando reinaldo
pidió excusa a este rastrero
que se paró en plena escena.
Se me pareció a Marchena
cuando aquellos exabruptos,
que se llamaron corruptos
uno al otro y viceversa,
por posiciones adversas
en el tema de usufructo.
12 Mayo 2018